El anuncio de la implementación en el calendario de la vacuna contra el dengue en Argentina surge como una respuesta del Gobierno Nacional ante la persistencia de la amenaza de epidemias de esta enfermedad.
La decisión se basa en recomendaciones respaldadas por una comisión técnica asesora, que ha evaluado datos epidemiológicos recientes. Esta medida se enmarca en un plan más amplio de prevención y control del dengue para los próximos años, donde se prioriza la colaboración con las autoridades provinciales y municipales.
La población objetivo para la vacunación se ha definido inicialmente en personas de entre 15 y 39 años, con un enfoque especial en las zonas del país donde el dengue es endémico y la circulación viral es alta, como las provincias del norte argentino. Se espera que esta estrategia ayude a contener la propagación del virus y a reducir la carga de enfermedad en estas áreas vulnerables.
Es importante destacar que, si bien la vacunación se focalizará en áreas específicas, no se descarta su extensión a otras regiones en función de la evolución de la situación epidemiológica y la disponibilidad de vacunas.
Además, se pondrá énfasis en la educación y concienciación pública sobre la importancia de las medidas preventivas, incluso entre aquellos que han recibido la vacuna, para mantener la protección y evitar la transmisión del virus. El plan de implementación incluye una estrategia escalonada, comenzando con poblaciones de menor edad y avanzando gradualmente, con el objetivo de lograr una cobertura vacunal significativa antes del período de mayor circulación viral, que suele ser hacia finales de año. Se espera que esto contribuya a reducir la incidencia de casos y a mitigar el impacto del dengue en la salud pública.
El éxito de esta iniciativa dependerá en gran medida de la colaboración y coordinación entre el gobierno nacional, las autoridades provinciales y municipales, así como del apoyo continuo de organizaciones internacionales como la Organización Panamericana de la Salud (OPS). La vacunación contra el dengue se presenta como una herramienta adicional en la lucha contra esta enfermedad, complementando otras medidas de control vectorial y promoción de la salud.
Fuente: La Nacíon
